Pifiadas de «sopar de duro»
Sí, las del llamado rey
emérito. ¡Mira que jugarse nombre y país por un regalo de 65 millones de euros!
Un regalo, solo eso, de un amigo al que le sale el dinero por las orejas. Así son
los amigos, más aun si se trata de jeques. (Cómo no declarar al fisco tan
magnífico obsequio, y creo que a mucha gente de a pie no les pasaría por la
cabeza esconderlo en un paraíso fiscal).
En fin, lo de Juan Carlos I es dinero de bolsillo si se compara con los cientos de millones que afanaron los caraduras del «Caso Ere» de Andalucía. (Muchos de ellos eran rojos y republicanos, sí, pero de los que se meten entre pecho y espalda gambas rojas de Santa Pola y champán del caro, y saborean puros cubanos: Cohiba Esplendido). Y, junto a esos indeseables personajes, los no menos sinvergüenzas de las «Comisiones fraudulentas del 3 por ciento en Catalunya», así como la banda criminal que llevó cabo el «lavado de millones de euros de mordidas», me refiero, entre otros, a la familia del que fue «Molt Honorable Senyor» Jordi Pujol, no pueden sino retorcerse de risa con la noticia con la que hoy nos desayunamos.
Cap de Creus (Girona), 4/08/2020
José Miguel Pueyo